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Ejercicio intenso y Parkinson
El 11 de abril se celebra el Día Mundial del Parkinson, una enfermedad que afecta aproximadamente a 300.000 personas en España. En este post veremos como ejercicio intenso y Parkinson pueden ser una buena combinación.
Ejercicio intenso, un nuevo hallazgo terapéutico
El ejercicio intenso en cintas de correr podría retrasar significativamente el avance de la enfermedad de Parkinson según un estudio publicado en JAMA Neurology.
La enfermedad de Parkinson es una enfermedad neurológica degenerativa crónica que causa trastornos motores. Enfermedad actualmente incurable, sus síntomas pueden aliviarse tomando medicamentos. Lamentablemente, estos medicamentos pierden eficacia con el tiempo.
Los médicos e investigadores del Parkinson han comenzado a buscar soluciones alternativas, especialmente para las etapas iniciales de la enfermedad. El objetivo es retrasar su avance para comenzar a tomar medicamentos lo más tarde posible y así retrasar los efectos más graves del Parkinson y el escape terapéutico. Con esta idea en mente, un equipo de investigadores de la Universidad de Northwestern, Anschutz Medical Campus de la Universidad de Colorado, comenzó a estudiar ejercicio físico con el mismo enfoque que un medicamento. De forma que, estudiaron la seguridad y eficacia de diferentes «dosis» de ejercicio en cinta.
Para este estudio, siguieron a 128 personas que habían sido diagnosticadas con la enfermedad de Parkinson en los últimos cinco años y aún no tomaban ningún medicamento. Luego probaron las capacidades físicas, sus frecuencias cardíacas máximas y el grado de enfermedad. Luego dividieron estos 128 pacientes en 3 grupos. El primer grupo no cambió sus hábitos y sirvió como testigo. El segundo grupo experimentó ejercicio físico moderado que consiste en caminar 4 veces por semana en una cinta mientras mantiene la frecuencia cardíaca entre 60 y 65% de su máximo. Finalmente, el último grupo también utilizó una cinta de correr durante 30 minutos 4 veces por semana, pero con una intensidad más alta, de modo que su frecuencia cardíaca se mantuvo entre el 80 y el 85% de su máximo.
Otro beneficio de la actividad física
De esta forma, se evidencian los beneficios del deporte de alta intensidad. Después de 6 meses, las personas que no han cambiado sus hábitos o que han realizado ejercicios físicos moderados han visto progresar su enfermedad, pero el grupo que ha seguido sesiones de alta intensidad de carrera en cinta casi no ha evolucionado de la enfermedad.
Como es lógico, los investigadores señalan que se necesita un estudio sobre más pacientes y en un período de tiempo más largo para evaluar con precisión los beneficios de la asociación ejercicio intenso y Parkinson. Sin embargo, los resultados de este estudio indican que alguien que ha sido diagnosticado con esta enfermedad neurodegenerativa puede considerar empezar «un programa de ejercicio intenso y Parkinson», según Daniel Corcos, profesor de la Universidad de Northwestern.
Los resultados de este estudio, de ser confirmados por otros, podrían cambiar el enfoque terapéutico de la enfermedad y permitir a los pacientes vivir más tiempo antes del inicio de los síntomas más graves y que más discapacidad provocan.
Desde Farmacias Jiménez Labaig y Plenafarma.es recomendamos acudir a un profesional (rehabilitador, terapéutica ocupacional, fisioterapeuta, licenciado en ciencias de la actividad física) para que paute un ejercicio adecuado a cada paciente y realice un correcto seguimiento del paciente y de su enfermedad.
Como en anteriores ocasiones animamos a practicar ejercicio y deporte de manera sana, adecuada a cada persona y siempre disfrutando.
Farmacéutico comunitario. Colegiado 05/644
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