Viajar es una actividad apasionante, lejos o cerca, proporciona experiencias únicas, y cambia nuestras perspectivas sobre el mundo. Os damos unos consejos para viajar con asma, facilitando un poco más el viaje a aquellos que padecen esta enfermedad respiratoria.

Consejos para viajar con asma

¿El asma puede condicionar nuestra manera de viajar? La respuesta es que no necesariamente tiene que hacerlo. Es cierto, viajar con asma puede ser un poco desafiante. Algunas personas padecen una versión más grave y corren un riesgo muy real de ser hospitalizadas si se desencadena. Otros solo tienen una afección leve y se desencadenan por algo específico, como la fiebre del heno. Independientemente como lo padezcamos, podremos viajar, solo necesitaremos tomar algunas precauciones sensatas.

Sigue usando tu inhalador durante tu viaje

Probablemente lleves tu inhalador donde sea que vayas, y no hay razón para cambiar ese hábito mientras estás de vacaciones. Asegúrate de llevarlo contigo donde quiera que vayas, ya que lo último que necesitas tener un ataque y no disponer de medicamentos. Un buen consejo puede ser llevarte un par de envases de repuesto y colocarlas en el equipaje de mano y el equipaje facturado. Pero ojo, revisa las condiciones de conservación, algunos necesitan estar refrigerados, no pueden exponerse a fuentes de calor, etc.

Previo al viaje puedes revisar en la web Vademecum.es el nombre que tiene tu medicamento en el país de destino, por si tuvieras que buscarlo allí. También es importante que te enteres del precio y las condiciones de dispensación en ese país.

Para viajar en avión, puedes necesitar poner tu inhalador en una bolsa de plástico transparente cuando atravieses el punto de control de seguridad del aeropuerto.

No todas las personas se ven afectadas por el asma de la misma manera. Asegúrate de saber qué lo desencadena y evita esas condiciones siempre que sea posible. Si el humo del cigarrillo es un desencadenante, recuerda que en muchas partes del mundo, fumar sigue siendo común en hoteles, bares y restaurantes. Si el polen es un desencadenante, mejor mantenerse alejado de áreas con una gran concentración. Revisa previamente los niveles de polen de tu destino para poder estar preparado.

Ante cualquier duda puedes consultar a tu médico o farmacéutico. En nuestro blog puedes encontrar más consejos para mejorar tu salud respiratoria. Y no olvides revisar tu botiquín de viaje ?

Luis Jiménez

Farmacéutico comunitario. Colegiado 05/644